Krista Connolly
Homeópata y Terapeuta en Técnica Bowen

Testimonios

Krista ha ayudado enormemente a mi familia desde principios de 2002.

En 2002, nuestra hija mayor, de 16 años, comenzó a perder hasta el 80 % de su cabello durante un largo período. Nuestro dermatólogo familiar la trató durante 8 meses, y el veredicto final fue que no había cura para su alopecia y que quedaría calva. Después de agotar todas las opciones en la medicina occidental, finalmente escuchamos sobre Krista y decidimos probar la homeopatía. ¡En 8 meses el cabello de nuestra hija había vuelto a crecer completamente! Dieciséis años después, nuestra hija sigue teniendo una cabellera completa. Gracias, Krista.

Nuestra segunda hija, entre los 8 y 12 años, también recibió cuidados de Krista. Solía faltar frecuentemente a la escuela debido a su asma, eczema e infecciones respiratorias altas. Tenía un sistema inmunológico débil. Después de varios meses bajo el cuidado de Krista, rara vez faltaba a la escuela y sus crisis de asma y eczema disminuyeron considerablemente.

Krista también me ha ayudado personalmente a eliminar el reflujo, infecciones sinusales y actualmente estoy recibiendo ayuda con algunos problemas de fibrilación auricular.

Toda nuestra comunicación con Krista ha sido por teléfono.
¡Tanto éxito sin necesidad de conducir hasta el consultorio médico!

Las citas telefónicas con Krista son cómodas, prácticas y dejan a uno sintiéndose fortalecido y esperanzado en cuanto al bienestar físico.

— BC | Spokane, Washington | Noviembre, 2018

Welcome

Caí sobre hielo negro hace más de un año.
Después tuve dolor en la pierna, pero pensé que se iría al sanar el moretón. No me di cuenta de que la condición empeoraba hasta meses después, cuando desarrollé una cojera pronunciada. Algunos días eran peores que otros, pero el malestar era constante. No sabía a quién acudir, hasta que un amigo me recomendó probar la Técnica Bowen.

Investigué para entender el proceso y encontré una terapeuta cercana: ¡Krista Connolly fue una salvación! Fue gentil, buena escuchando y muy clara explicando el proceso y cómo ayuda. Al final de mi primer tratamiento, ¡me di cuenta de que el 80% del dolor en mi pierna había desaparecido!

Además, en esa misma sesión, Krista trató un problema reciente en mi hombro: no podía levantar el brazo por encima de la altura del hombro. Krista aplicó tres presiones con intervalos de 2 minutos y, como por arte de magia, ¡pude levantar el brazo hasta el techo! No lo habría creído si no lo hubiera experimentado.

He tenido algunos tratamientos más y sigo haciendo los ejercicios suaves que Krista me indicó, y el dolor sigue desapareciendo. Ahora estoy casi al 100% libre de dolor. Tengo plena confianza en Krista y en el proceso.

A diferencia de otras alternativas, la técnica Bowen no puede hacer daño. Es suave y trabaja con tu cuerpo para realinearlo. Sin medicamentos, sin trucos, sin dolor ni compromiso de tratamientos largos. ¡Realmente funciona!

— HM | Newton, MA | 2018

A mi hijo le diagnosticaron asma grave a los 2 años.
Su asma se desencadenaba por el ejercicio y por alergias ambientales y alimentarias. También sufría ataques de asma cada vez que contraía un virus respiratorio alto. Sus alergias comenzaron en agosto de 2006 y continuaron sin cesar durante 3 meses, hasta octubre, cuando conocí a Krista.

Además de preocuparme por mi bebé, yo estaba agotada y aterrorizada por esos ataques prolongados que solo se aliviaban por poco tiempo con nebulizadores y esteroides orales. Lo que me impresionó de Krista fue la precisión y confianza con la que pudo encontrar un remedio para mi hijo (él no podía describir bien cómo se sentía y yo, como mamá, hacía lo mejor que podía).

Krista siguió el tratamiento, cambiando el remedio solo cuando fue necesario (yo estaba lista para darle todos los remedios que tenía en mi kit homeopático, ¡todos a la vez!). Durante los siguientes dos años, vimos cambios constantes y sorprendentes en Dominic. Sus ataques se hicieron más cortos y espaciados; su reacción primero a los alimentos y luego a las alergias externas disminuyó de forma notable y constante.

Este año 2009, solo he usado el nebulizador dos veces, y nunca un inhalador con esteroides. Estamos en primavera en Indiana, todo está floreciendo. Dominic no solo no reacciona con ataques de asma, sino que no tiene ningún tipo de alergia a la primavera. Cerca del final del invierno tuvo una infección viral en el pecho con fiebre alta y tos, pero no se convirtió en un ataque de asma (por primera vez desde 2006).

Siento que le debo a Krista el resto de mi vida. También quiero decir que durante estos dos años Dominic ha estado muy bien socialmente. Es un niño muy inteligente, creativo, siempre dulce y de buen humor. Se siente un equilibrio profundo y completo en este niño de 4 años. Agradezco a Dios y a la homeopatía por esta felicidad.

— Aliaksandra | Issaquah, WA | 10 de agosto de 2013

Mi hijo ha tenido asma desde que tenía 2 años.
Tomaba dosis diarias de Singulair y Flovent (un esteroide) y durante los ataques de asma debíamos darle albuterol cada media hora. Para los 4 años, la frecuencia de los ataques había aumentado considerablemente, al igual que las dosis de albuterol y esteroides. Nos sentíamos muy desesperados e impotentes.

Fue entonces cuando comenzamos a explorar medicinas alternativas y conocimos la homeopatía y sus poderes curativos. Buscamos en la Sociedad Norteamericana de Homeópatas y encontramos a Krista Voysest. Ella le prescribió medicina homeopática a mi hijo. Desde que empezó a tomarla, no ha necesitado esteroides ni albuterol.

Ahora podemos enfocarnos en las cosas buenas de la vida sin que el asma nos moleste más. Es muy importante elegir un médico homeópata con mucha experiencia, y estamos felices de haber elegido a Krista. Mi casa en Chicago está a dos horas en coche de ella, pero valió la pena porque mi hijo ahora está libre de asma.

— Chitra | 14 de agosto de 2013

Krista Voysest es una practicante perceptiva y excelente de la homeopatía.

Forma parte de un grupo selecto de estudiantes que han completado mi Master Clinician Course y que realmente se han ganado el título de Homeopathic Master Clinician.

— Louis Klein R.S.Hom. | Surrey, Columbia Británica, Canadá | 22 de agosto de 2013

Hace unas semanas, me desperté con síntomas muy incómodos de frío en el lado derecho del abdomen.

El dolor se extendía hacia el hueso pélvico e incluso a la espalda. Durante el día sentía un dolor tirante y arrastrado que empeoraba al levantar objetos pesados. Empecé a sentir mucho miedo por lo que podría estar pasando.

Llamé a Krista cuatro días después de que comenzó el dolor. Ella atendió el caso agudo y, tras una hora de consulta, me recetó un remedio. ¡No podía creer los cambios! En apenas 15 minutos después de tomar la primera dosis, el frío se convirtió en calor. Dormí toda la primera noche y en tres días el problema desapareció.

No necesité ultrasonidos, radiografías, especialistas ni nada más. La consulta homeopática con Krista, por teléfono y desde mi casa, me salvó del dolor, el miedo y potencialmente de gastar cientos de dólares en tratamiento. Como siempre, después de trabajar con ella, me siento profundamente agradecida por el arte de la sanación que practica con tanta maestría.

— Nancy | Grand Rapids, Michigan | 14 de octubre de 2014

Fui un niño muy enfermo durante mi crecimiento y me administraron muchos medicamentos tradicionales (incluidos antibióticos), ya que mis padres no conocían la homeopatía.
Durante los primeros 18 años de mi vida desarrollé bronquitis crónica, laringitis crónica, alteraciones en el recuento de plaquetas, hernias discales y trastornos hepáticos, entre otros problemas. Solo hubo raros meses en los que no tuve que tomar algún medicamento convencional. En otras palabras, soy un caso difícil para un homeópata, ya que las numerosas dosis de medicamentos convencionales alteran mucho a una persona, como he aprendido.

Trabajé con varios homeópatas durante algunos años antes de conocer a Krista en 2007, cuando tenía 29 años. Aunque me sentía mucho más saludable que a los 18, seguía siendo una persona cuyos cambios de humor, depresiones ocasionales y problemas de salud peculiares me hacían un miembro miserable de la familia.

Krista tomó mi caso complejo y escuchó pacientemente todos mis múltiples problemas físicos y emocionales, presentes y pasados. Me prescribió un remedio justo después de nuestra conversación y luego dio seguimiento respondiendo a mis llamadas y correos electrónicos cada vez que tenía preguntas. Es la homeópata más observadora y atenta con la que he trabajado.

Gracias a ella, a los 31 años me siento más joven, entusiasta y físicamente mucho más saludable que en la mayor parte de mi vida. La capacidad de Krista para encontrar el remedio correcto es casi intuitiva, aunque sé que esa no es la palabra adecuada para la ciencia que ciertamente es la homeopatía.

Ojalá el conocimiento sobre la homeopatía se difundiera más y de forma más abierta, ya que salvaría a muchas personas de su sufrimiento.

— Madre de Dominic | Elkhart, Indiana | 12 de octubre de 2007

Hace aproximadamente medio año, resbalé y caí sobre hielo.
Caí sentado, pero me sentí bien y seguí el día sin problemas. Sin embargo, al despertar la mañana siguiente, sentí un dolor muy molesto en la parte baja de la espalda. Me levanté y comencé a moverme, pero no me gustaba nada cómo se sentía. Decidí hacer ejercicio rápido, pensando que solo necesitaba que la sangre circulara — no relacioné la caída con una posible lesión en la espalda.

Hice algunos jumping jacks; el dolor seguía siendo agudo y fuerte, pero apreté los dientes y continué. Cuando eso claramente no ayudó, me acosté en el suelo para hacer abdominales. Fue muy, muy doloroso. Hice solo seis y ya estaba sufriendo mucho. Me di cuenta de que no podía sentarme, ni pararme, ni arrodillarme o inclinarme hacia adelante. ¡Solo quería gritar! Terminé acostado en la cama, sin poder moverme, sin poder poner una almohada bajo mi cabeza por el dolor, y tenía que arrastrarme hasta el baño.

La radiografía mostró dos discos desplazados que presionaban el nervio ciático. Fui al quiropráctico, pagando 40 dólares por sesión durante 5 sesiones, pero los avances fueron mínimos.

Finalmente, decidí llamar a Krista. Para ella quedó claro que, además de un remedio homeopático para el caso agudo, necesitaba terapia Bowen. Sería más barato, más rápido y mucho más efectivo que la alternativa quiropráctica. Nunca había probado Bowen, pero confié en el juicio de Krista.

La primera sesión siempre es un “calentamiento”; no sentí casi nada, como Krista me había explicado, porque el cuerpo realiza un trabajo inicial de equilibrio y limpieza. La segunda sesión, la sesión “clave”, me sorprendió mucho (y no soy de los que espera mucho de las terapias alternativas sin ver resultados).

En unos 40 minutos, la segunda sesión eliminó aproximadamente el 85% del dolor. Pude levantarme y caminar sin bastón por primera vez. En el camino de regreso, caminé intencionalmente una cuadra para comprar un jugo en la tienda, solo para sentir la maravilla de estar de pie otra vez.

Ahora me pregunto por qué acudí primero a un médico tradicional cuando podría haber resuelto mi problema con Bowen o homeopatía. Es mucho más barato, suele funcionar mucho más rápido y no tiene efectos secundarios negativos. Y todo con un costo menor del que jamás imaginé.

Sin duda, debimos ir primero con el terapeuta Bowen y no al quiropráctico. Krista tenía toda la razón, y me siento humilde al darme cuenta de que debo romper mis prejuicios — que aprendí de la medicina tradicional, la cual solo quiere tu dinero.

Krista, la homeopatía y Bowen quieren SANARTE. Una diferencia enorme. ¡Muchas gracias, Krista, por hacer tan bien lo que haces!

— Dave | Orlando, FL | 28 de abril de 2008

I have gotten much help in healing through Krista's thorough assessment and wise counsel. We were able to communicate by phone for the initial consult as well as follow ups. Krista always makes me feel validated in my observations. I definitely experienced a rapid, gentle, and thorough change for the better in my health, mentally , physically, and spiritually. I now take a more active role in my health care rather than fear the worst. Krista encouraged three friends and I to take a video course in acute care Homeopathy and we are able to help family and friends.

GAIL ABBOTT, BA,BSN : SPOKANE, WA | FEBRUARY 17, 2002

Mi familia y yo hemos recibido una gran ayuda de Krista Voysest y la homeopatía.

En 1995 me diagnosticaron endometriosis. No respondí a la terapia hormonal y, debido a que había tenido dos cesáreas, mi seguro me informó que no cubrirían la cirugía porque el riesgo de una emergencia médica era muy alto. No tenía dinero para pagar la cirugía en efectivo, así que comencé a resignarme a una vida en la que pasaría la mayor parte del tiempo con tanto dolor que no podría funcionar.

En ese momento, una amiga me presentó a Krista. Ella encontró el remedio adecuado para mí y comencé a mejorar de inmediato. Mi endometriosis se curó por completo y ahora gozo de mejor salud que nunca.

Gracias a mi éxito, mi suegro decidió probar la homeopatía para sus blefaroespasmos. Los nervios de sus párpados estaban tan degenerados que sus ojos se quedaban pegados cerrados y tenía que abrirlos manualmente. Ya no podía conducir ni trabajar. La inactividad lo llevó a la depresión, y mi suegra me dijo que incluso consideró suicidarse. Probó tratamientos con botox, pero empeoraron los problemas. Sus ojos quedaban medio abiertos y medio cerrados hasta que el efecto desaparecía. No podía dormir así, por lo que los médicos lo pusieron con narcóticos fuertes, que solo agravaron su depresión.

Krista comenzó a tratarlo homeopáticamente y, en dos años, la condición se curó por completo. Este año cumple 67 y aún dirige su propio negocio en Taiwán. Está muy sano y feliz gracias a la homeopatía.

Krista maneja los casos a distancia muy bien. Yo vivo en California y mis suegros en Taiwán. Nos mantenemos en contacto por teléfono o correo electrónico para ajustar los remedios. Seguimos mejorando cada vez más bajo el cuidado de Krista.

— Teresa Liu | Anaheim, CA | 3 de mayo de 2014

¡Krista me ha devuelto la vida!
Después de 30 años sufriendo diagnósticos mentales graves y debilitantes, Krista encontró algunos remedios y ahora estoy libre de medicación. También sufría de bronquitis estacional semestral desde siempre, una tos crónica muy congestionada, migrañas que me atacaban varias veces al mes y, sí, ¡también estoy curado de todo eso!

Gracias a Krista, mi estado mental y emocional está muy equilibrado y realmente estoy disfrutando de la vida como siempre soñé.

¡Gracias, Krista, te debo todo!

— T.S. | Washington | 18 de julio de 2015